Como apuntaba Jordi en una anterior viñeta Pero… ¿qué es esto del coaching? son varias las formas en que un coach provoca reflexión y acción en el coachee. Quizá la más conocida de ellas sea «la pregunta». En mi experiencia hay una que resulta especialmente incomoda porque es difícil de contestar: ¿Para qué?.
Con frecuencia la persona que recibe una pregunta del tipo para qué (¿Para qué haces eso?, ¿para qué no lo haces?, ¿para qué dejas que….?, ¿para qué emprendes….?), inicia su respuesta: «…porque…». Y el coach insiste: «no te pregunto por qué, sino para qué».
¿Cuál es la diferencia?
Cuando alguien contesta al por qué, responde sobre las causas, y las causas pueden ser mútiples, y las causas nos remiten al pasado, y las causas contribuyen a consagrar la situación de imposibilidad que el coachee está trabajando, simplemente porque la justifican, porque afianzan con su relato lo inevitable que resulta la situación que el coachee está viviendo. Sin embargo, cuando alguien da respuesta al para qué, encuentra sus objetivos, encuentra la verdadera naturaleza de su deseo, descubre qué futuro persigue. Y descubrir cuál es el fin último que perseguimos con nuestra acción u omisión no es siempre fácil porque a veces ese fin último es de naturaleza inconsciente. En esa búsqueda, pueden aparecer creencias limitantes que nos generan imposibilidad. Muchas veces, es a partir de ahí, cuando un proceso de coaching empieza a cobrar su efectividad…y permite, al evidenciarlas, deshacer y poner en cuestión el modelo mental que nos ha impedido hasta el momento, conseguir nuestro objetivo.
Aunque difícil de responder, ¿para qué? es la pregunta
Araceli Cabezón
Muy interesante el matiz que toma la respuesta.
Me gusta el sentido común que predomina en vuestros escritos y que es tan poco común a la que nos despistamos.
Gracias por compartir experiencias de la profesión.
Guztiz bat nator esandakoarekin